miércoles, 18 de noviembre de 2009

¡Tráganos tierra!



Ay, no sé pero ojalá no les pase tan seguido como a mí esto de estar protagonizando escenas de esas que uno quisiera que se lo tragara la tierra. La más reciente acaba de sucederme apenas el sábado (14 de noviembre) junto con mi hija mayor, la Mau.
Ella me acompañó a buscar un sofá-cama que yo había visto recientemente y que deseaba comprar ya que no tenemos un cuarto de visitas. Lo había visto en una gran mueblería ubicada en un concurrido centro comercial que, por ser quincena, ese día estaba más concurrido que de costumbre.
Vimos el sofá y a ambas nos pareció muy bonito, además de que se ajustaba a nuestro presupuesto. 
Pedimos que nos lo mostraran pero el vendedor no pudo reclinarlo y demostrar todas sus bondades.
Como ya no tenían otros en existencia, el joven que nos atendió nos dejó un momento para llamar y averiguar en otra tienda. 
Cuando nos quedamos solas, decidimos esperar sentadas. Yo no me di cuenta, pero mi hija notó que al recostar la espalda el sofá cedía hacia atrás, así que mientras yo me acomodaba, la Mau volvió a recostarse con cierta fuerza para ver si así el sofá se convertía en cama... y ¡Blám! yo sólo sentí que caía de espaldas y en un instante vi nuestras piernas hacia arriba y sentí el golpe en la espalda cuando el sofá cayó al suelo haciendo un enorme escándalo que alarmó a los empleados y clientes del lugar... y que debe haber divertido mucho a los curiosos que veían tras los cristales... Vale decir que la famosa mueblería parece pecera y todas ¡TODAS! sus paredes son de vidrio.
En el momento, por los nervios o porque siempre estoy consciente del ridículo... pues estallé en carcajadas. y aunque de plano sentí mucha vergüenza, siempre que recuerdo ese bochornoso momento es con mucha mucha risa que lo hago.

24 comentarios:

Unknown dijo...

JAJAJAJAJAJAJA!!!
Que bueno! Que bueno! Que bueno! Al igual que tu yo me hubiese partido de la risa y tendrían que venir con una grua para levantarme del suelo... A mi me pasa un montón de veces, si voy con mi marido la verdad es que no le importa mucho pero si voy con mi hermana mayor se pone de los mil colores y nunca más pone un pie en ese sitio.
Besos

Neogeminis Mónica Frau dijo...

jejejejjejeeje...me imagino que la vergüenza fue mucho más grande que el golpe que recibieron! ajajjajaaa..y frente a la vidriera! ajjajaaj...y bueno, mejor es reírse y no dejarse vencer por el temor al ridículo! ..a todos nos ha pasado alguna vez algo bochornoso! jajaja

Muy divertida tu anécdota!

un beso.

Johan Bush Walls dijo...

Yo creo que ese es el estilo del sofa-cama; o sea, para acostarse se le da vuelta y la cama es el suelo.

Siempre me ha parecido de mal gusto reirse cuando la gente se cae o se topa en los vidrios o le pasan cosas semejantes, de muy mal gusto; pero disfruto riéndome.

Salú pue.

casss dijo...

Nada mejor que una buena risotada para salir del paso, después de todo la culpa era de la tienda que no tenía en sillón en buen "funcionamiento". jajajaj, pero la verdad, que lo primero es querer que uno lo trague la tierra.
NO HAGAS ESO, QUE LA TIERRA NO TE TRAGUE, QUE TE QUEREMOS POR AQUI CONTANDONOS HISTORIAS DE TODOS LOS COLORES.
APAPACHOTES!!!

Anónimo dijo...

jajaja sin duda, debió haber sido super gracioso!!

LadyMarian dijo...

jajaja!! Es que además eso de probar camas, colchones, almohadas es siempre un poco ridículo. Para probar bien un colchón o una almohada tendrías que acostarte con postura de dormir. Y la verdad es que quedás bastante ridícula. Y ni hablemos de pretender testear el colchón o la cama para "otras cosas". Por eso después vienen las sorpresas, los crujidos, etc. jaja!!

LadyMarian dijo...

Dejo otro comentario porque no seleccioné la casilla de seguimiento de comentarios. ;)

Ana Patricia dijo...

jajajajajajjajajaajajajajja perdón Nancy pero no te imaginás la risa que me provocó, sólo de imaginarme la escena... y lo peor es que ibas en falda deplano jajaja
Bueno, te mando un abrazo y siempre te leo porque me divierten esas tus historias y para estar en contacto.

Patty

Nancy dijo...

Hola Quién sabe... jajaja, fíjate que cada vez que me acuerdo me vuelvo a reír. Hoy por la tarde tengo que ir al otro almacén a buscar el sofá cama... no lo voy a probar, jajajajaja

Neo, tienes razón... la verdad es que no sentí ningún dolor... solo después, en el estómago, pero fue de la risa.

Johan, creo que mejor me compraré un sleeping. a mí tampoco me parece correcto que la gente se ría del que se cae o golpea, pero no puedo evitarlo... aunque la que se caiga y golpée sea yo.

Cass, gracias, tú no te preocupes que nunca se abre la tierra para tragarme... de ser así a cada rato se hubiera abierto. Y como ves, a pesar de todo, sigo haciendo cosas para no terminar nunca con mis historias. Apapachos y mil gracias por tus palabras.

Ay Hilda, ya se imagina. Cada vez que me acuerdo me da risa y la gente se me queda viendo como pensando ¿y a esta loca qué le pasa? pero es que así de gracioso fue.

Tienes razón Lady Marian. Yo nunca he probado una cama acostándome en ella, pero creo que es un poco cursi. Es cursi probarlo todo... pero si no lo haces no sabes lo que estás comprando. jajajaja

¡Patty!, jajaja, ya ves que sigo haciendo clavos... pero no seas pura lata mujer. Deci que fue sábado y yo iba de pantalones, igual que mi hija. Me alegra hacerte reír aunque sea de lejos... siempre en contacto ¿eh? abrazotes

dianitah! dijo...

hahaha que loco!!!
hahaha XD yo ni me hubiera podido levantar de la risa... XD

y... si compraste el sofa???
hahaha si es que lo hiciste debió de haber sido una buena atraccion en la sala...no, en cualquier sala... XD

sale, que estes muy bien, saludos!!!

Any dijo...

Ahjjajajajajjj! lástima que no había nadie por ahi para inmortalizar el momento!
Me imagino como se habrán reído los que miraban en ese momento la vidriera del local. Y bueno, los entretuviste un rato jajajaa.
No te preocupes, yo soy igual de papelonera, eso es porque estamos siempre curioseando y tocando todo.
un beso

Anónimo dijo...

Que cómico, que momento!!! que verguenza, yo me muero de la risa y de la verguenza, jajaja.
Menos mal que lo probaste mirá si te pasa en tu casa y resultaba que estaba fallado. Un beso grande.

José Kontreras dijo...

Jajaja Nancy!! lo bueno es que no te lastimaste jajaja! ya me imagino!!! esa será la compra inolvidable del sofa! jiji

Angel Elías dijo...

Estimadisima Nancy: Creo que he de invitarla a salir más seguido, teniendo en cuenta que de sus salidas siempre se acontece un fenómeno de hilarismo impresionante!!!

jajajaj me gustan sus historias!!!!

Nancy dijo...

Hola Dianitah, no he comprado el sofá pero lo tengo que hacer. Ayer debí salir pero me dio pereza jaja, así que quizá sea hasta el sábado. Lo bonito es que tendrá su historia… aunque no sea el mismo.

Any… me reí con tus palabras y te he leído como tres veces. De pronto se me quitó la risa y me asusté: ¿qué tal si tienen cámaras de seguridad y ya subieron el video a youtube? Ay… los demando, jajajaja.

Ay Normita… yo ya no debería saber qué es la vegüenza, jajaja, pero siempre me da un poco. Creo que mi mecanismo de defensa es la risa, porque me río muchísimo…

José Kontreras… hola amiguito, qué bien que te fijas en ese detalle ¡es cierto! No me lastimé. Yeeeeeeee. La compra será inolvidable… espero que me esperen para el sábado. Jejeje

Ángelito, yo lo pensaría dos veces. Es divertido contarlas y saber que los demás se ríen con tus historias… jajaja, pero estar en el momento… ay no es muy alegre que digamos. En fin, tampoco creas que me pasa todo el tiempo… nomás tantiiiito,

MARU dijo...

jajaja Mira a mi me pasa eso y me dá un ataque de risa que me tienen que poner oxígeno...
Bueno, si me pasa cuando era joven, me corto las venas....
NO PASSSSSA NADA!!!!!
Um besito

Rochies dijo...

me imagino que no lo compraron!
Era evidente que no servía! linda propaganda a puro vidrio!
¿le llegaron mis fotis?

Prado dijo...

Qué genial!!! yo tengo años de no caerme. Cuando me caigo nunca me puedo levantar por la risa. Cómo me relaja leerte. Saludos y un abrazo.

Mariela Torres dijo...

¡Qué situación! ¿no se lastimaron?, ¿lo compraron o no?

Besos.

Anónimo dijo...

Jajajajaja y más me reí mirando el dibujo, esta genial!!!
Sabés que a mi también me pasan esas cosas y seguido, pato criollo decimos acá, cada paso una cacona jejeje
Besitos!!

Anónimo dijo...

=0D que chistoso JAJAJA... pobrecita de ti, el oso que te aventaste y mas que lo recordaras cada vez que te sientas en ese sofa =0p

cuando uno hace el ridiculo por la circunstancia que sea, o mejor es reir... pues ya que!

besitos nena

Nancy dijo...

Luna, querida, jajaja, sobreviví... sobreviví para contarlo jajajaja

Rochitas, no lo he comprado, pero voy a hacerlo. El problema era que el sillón de esa tienda tenía puesto un seguro y los empleados no sabían quitarlo. Tras la caída, el sillón se convirtió en cama, muy bonita, por cierto. Gracias por las fotos... veremos veremos que podemos hacer

Hola Prado, dichosote... bueee, yo también ya tenía años de no caerme, pero eso no es sinónimo de tener años de no hacer el ridículo. jajaja decí que no me he caído delante de ti.

Matiela, gracias por preguntar. Te diré que no nos lastimamos afortunadamente. Es un sofá muy cómodo y amortiguó la caída. Como diría Mafalda, sólo me lastimé el orgullo. Y sí, pienso comprarlo, pero es que se me vino una semana de muchas cosas... ya veremos.

Hola Tamara. Aquí hay un dicho similar, pero no lo recuerdo bien. Dice algo como que uno parece pato, porque si no se caga en la entrada lo hace a la salida, o algo así... ;o)

Sí Sonia, la mejor salida es la de reírse de uno mismo. No nos queda más. Pero lo bueno de que esas cosas pasen es que siempre puedes volverte a reír y seguirlo contando para que otros también rían. Claro, como dijo Luna, si me hubiera pasado de adolescente ¡me corto las venas!

La Vivi dijo...

Ay ay ay!!! jijiji no me puedo contener la risa. Estan bien verdad?
No estan golpeadas? el ego talvez jijiji. buenisima charada!!!

paola guillen dijo...

solo te puedo decir algo
jajajjajaj XD